La Ciudad de Buenos Aires podrá contar en breve con recursos
emanados del "juego", esto es recaudar muchos millones de pesos del
casino flotante, merced a una decisión de la Corte Suprema de
Justicia.
Esos montos más el aumento del ABL otorgarán a la
administración porteña la capacidad de tener un importante respiro en
sus arcas.
Surge la pregunta entonces: ¿cuáles son
los rubros a los que el Gobierno de la Ciudad deba otorgar prioridad
y atención?
Uno de los más urgentes sin duda, es el tema de la
situación de los más necesitados. Y aquí se suma también, el tema
de la vivienda.
Por eso, resulta saludable que la electa vicejefa
de Gobierno, María Eugenia Vidal, no se mantenga al frente del Ministerio
de Desarrollo Social -como era la intención inicial- sino que se designe
un ministro que trabaje tiempo completo a ese asunto. La vicejefa debe vincularse a asuntos de la
Legislatura porteña y además, reemplazar a Mauricio Macri en muchas
oportunidades y citas.
La otra cuestión es el asunto de las viviendas: la
Ciudad debe tener una política activa con esto. Y tomando en cuenta la infeliz historia
de las viviendas de la Fundación Sueños Compartidos y los hermanos Schoklender,
debe haber una decisión clara de la gestión porteña de construir viviendas
para los sectores más necesitados y de paso.