jueves, 31 de octubre de 2013

La Ciudad de Buenos Aires enfrentó en este fin de octubre una tormenta salvaje.

Todas las prevenciones fueron buenas, con anticipación y con un elemento fundamental: con todos los funcionarios presentes y trabajando.

Los funcionarios deben hacerse cargo del rol para el que fueron elegidos o designados, según cada caso. Y ante ello, no hay más verdad que el del trabajo, la presencia y las palabras  adecuadas ante cada situación.

Buenos Aires ha sufrido cambios climáticos en los últimos tiempos y esto es importante registrarlo.

Por eso, con buena información, funcionarios capacitados y presentes y dedicación, todo será mejor para la vida ciudadana.

Pablo de León
@pablodeleon1